Magic Flight y Tetralogy en Ulzama
En estos días pasados, en el hipódromo de La Zarzuela y con la presencia de representantes de distintas organizaciones y yeguadas internacionales, se ha celebrado la subasta anual de yearling organizada por la Asociación de Criadores de Caballos de Carreras que dirige Fernando Melchor.
Dicho esto, que es una obviedad para todo el que lee este blog, he de decir que la sensación que me ha quedado después de la subasta ha sido de desesperanza y desilusión.
El sabado, después de dos días muy largos en el hipódromo, llegué a mi cama y antes de dormir me quedé pensando en lo vivido y visto durante los dos últimos días. Al poco rato me pregunté; ¿Que cojones estoy haciendo? ¿Donde voy?
Las primeras respuestas fueron básicamente negativas pero, tras una reflexión, he optado por seguir el camino marcado hace años cuando compré a Brecha. Hay que seguir haciendo camino y poner los medios para seguir mejorando y avanzando. Aun así, tengo la certeza de que hay muchas cosas que se tienen que cambiar en este mundo nuestro de la cría, en el hipódromo, en lo que nos mueve a seguir y como tengo fe estoy convencido que este cambio tiene que llegar pronto. Por que Creer es Ser.
La subasta ha sido desoladora. Los yearlings, todos con alguna rara excepción, han sido criados y presentados con buena nota y nadie, repito que nadie, merecía el trato perverso recibido en el ring. He visto casi todos los potros en los días previos a la subasta (y los que me quedaban por ver los he visto pasar por el ring) y no creo que se merecieran semejante trato y humillación.
La cría española, por lo visto estos dos días, se encuentra pasando su noche más oscura y no sólo por la jodida crisis economica que nos asola. Hay otros factores, pocos pero sumamente determinantes, que hacen que esto parezca un barco a la deriva que no hay quien lo ponga derecho; la falta de programa, las pocas carreras, la falta de apoyo al caballo nacional, la lentitud de quienes están al mando para crear una apuesta exterior que nos de el empujón necesario y, en temas de cría, la polarización, el nulo apoyo institucional y la falta de cohesión en un sector tan pequeño como este.
Me sorprende que nadie haya aprendido nada después de los años de cierre del hipódromo, llama la atención que elementos tan básicos en este sector como son entrenador-propietario-criador no canten a coro la misma canción para avanzar en un futuro comun. Porque como estan las cosas, ¿donde cojones vamos?.
La imagen que se ha dado de la cria española ante franceses e irlandeses presentes estos días en Madrid ha sido lamentable. !!!Había que ver las caras de alguno mirando pasar por el ring los yearlings uno tras otro sin puja!!! La imagen ha sido peor que mala, con falta de cohesión, división y nulo interes en nuestro producto lo que habra llevado a no pocos a concluir que el mercado de la cría en España no se sostiene por que el propio sector español no lo apoya.
Es fácil entender que un propietario quiere comprar calidad al mejor precio. Esa es la ley de la oferta y la demanda, pero lo que no se mantiene es que un yearling que ha pasado por el ring y no ha encontrado postor en 4.000 euros sea adquirido horas después en 5.000 euros en trato directo. ¿Que explicación tiene eso? Una fea, pero que muy fea.
Nuestro mercado tiene la especial singularidad que pretende potros muy correctos (cuasi perfectos), con un padre que este entre los buenos de Europa (Montjeu, Galileo, H. Run….), una madre ganadora (o madre de buenos ganadores) con una abuela de black type y una tercera madre fundadora de estirpe para, después, intentar comprarlo lo mas barato posible.
Los criadores nos estamos acostumbrando a no saber defender nuestro trabajo y nuestra ilusión ante el propietario, el entrenador y todo el sector. Y no solo por la división interna que hay. No creemos en nuestro producto, no lo defendemos con cojones, dejamos que sean otros quienes marquen el valor del producto criado con tanta ilusión, nos bajamos el calzón a la primera de cambio y dejamos que nos lo quiten de las manos en el precio y condiciones que el contrario quiera.
Hemos de creer en lo que hacemos, tener fe y no dejar a nadie que imponga condiciones. Pactar si, imponer nunca!
Esta ha sido mi tercera subasta en España y durante estos años he aprendido algo. Aquí tenemos todos (sálvese quien pueda) "mucho de don pero poco de din", ya que de pasta andamos muy muy escasitos (por no decir que el bolsillo está vacío y con unas pocas facturas por afrontar). Aun asi, es interesante y curioso ver a algunos acercarse a los boxes de los criadores/vendedores para inspeccionar un yearling, cómo lo miran, inspeccionan y lo juzgan en el silencio de quien cree estar en situación de poder.
Y me pregunto si quien cree estar investido Doctor Honoris Causa, tocado por la barita de la sapiencia equina, se puede imaginar cuánta ilusión, cariño, esfuerzo y ganas tenemos cada criador depositadas en cada producto que sale a la venta!.
Si el sector piensa que los criadores estamos en esto para hacernos ricos están equivocados de principio a fin. Aunque somos realistas y tenemos los pies en el suelo en términos de dinero, en nuestro fuero interno muy pocos podrían pagar lo que en nuestra imaginación vale nuestro potro. Los criadores no pretendemos hacernos ricos con esto, pero como decia Aristoteles "en el justo medio está la virtud" lo que en terminos equinos significa que "entre paso y galopar está el trote regular" aunque lo visto estos dias no es nada de eso.
Los criadores, todos, tenemos que hacer frente común y defender nuestro producto. Todos, insisto, desde el mas poderoso hasta el mas humilde, de norte a sur y de este a oeste, para poner coto a algunas de las actitudes que han tenido lugar estos días.
Hemos de poner en valor nuestra cría con ganas, hay que defenderla con fuerza y con cojones ante quien nos desprecia, hay que trabajar en cohesión para que nuestro futuro sea digno y para que nadie pueda ningunear ninguno de nuestros productos por muy modestos que sean. Nos tenemos ganado nuestro sitio, somos la clave y no podemos dejar que nadie venga a faltarnos al respeto.
Ayer se me hacia imposible defender nuestra cría ante los representantes de dos instituciones europeas presentes en la subasta. Era inexplicable. !!!Como queremos pretender que un foráneo invierta en nuestra cría con lo visto estos días!!!! Esto que ha pasado sólo beneficia a las subastas europeas que, ante el panorama que se presenta en la cría española, saben que se llevarán el gato al agua con sus productos (los mediocres, claro, por que los buenos no estan al alcance de los bolsillos de aqui).
Es cierto que para algunos puede ser un momento muy duro y harto complicado. Hay quien ha vendido poco, hay quien no ha vendido nada y otros hemos salvado el pellejo por los pelos. Aun así, tenemos que empujar y ser fuertes, unir esfuerzos y avanzar para mantener nuestro sitio con la dignidad que nuestro trabajo y esfuerzo merecen.
Nos hemos ganado a pulso el respeto de todos esos que ahora desprecian nuestra cría y no podemos consentir que nada ni nadie nos quite algo conseguido con el esfuerzo de tantos durante muchos años. Por los que estaban, por los que estamos y por los que vendrán. Tenemos la obligacion de mantener lo conseguido por los que nos predecieron, hay mejorarlo y engrandecerlo, pero con nuestra actitud llevamos el camino equivocado.
Entiendo que es fácil hablar cuando no se está en la piel de quien está pasándolo mal en todos los sentidos (económico y moral al a ver sus potros ignorados en el ring), pero esta situación tiene arreglo si nosotros, los criadores, confiamos en nuestras posibilidades y plantamos cara a quienes de una u otra forma quieren sacar partido de una situación nada alentadora.
Hemos de creer en nuestra afición y que esta pasión que es la cría de caballos de carreras nos una en momentos como este. Tenemos que confiar en nuestro producto y en nuestro trabajo, en que somos capaces de avanzar y de poner a nuestra cría en el lugar que le corresponde (que no es donde está actualmente). El poder está en nuestras manos por que creyendo en nosotros mismos, en lo que hacemos, en nuestras posibilidades y, desde la unión, conseguiremos una cría nacional fuerte.
Hace muchos años Joaquín Rivero Merry, persona muy querida y un sabio de los caballos, me dijo que un caballo vale más cuando promete porque, razonaba el bueno de Joaquín, cuando se hace realidad no hay quien lo pague y por que si no se confirma no vale nada.
Nuestros yearlings son la promesa de futuro de nuestras carreras, tenemos que creer en ellos y defenderlos hasta el final como se hace con un hijo.
Por que Creer es ser!
Monteagudo en el ring de ventas (foto Carloszuma)
